Aquí hay algunas razones convincentes para considerar los programas de ejercicio terapéutico como parte de su plan de tratamiento:

1. Mejora la función física: El ejercicio terapéutico se adapta específicamente a sus necesidades y capacidades físicas, lo que le ayuda a mejorar la fuerza, la flexibilidad, el equilibrio y la resistencia. Esto puede ser especialmente beneficioso si está recuperándose de una lesión, cirugía o sufre de una condición o enfermedad crónica.
2. Alivia el dolor: Muchas investigaciones respaldan el uso del ejercicio terapéutico para reducir el dolor crónico. A través de ejercicios específicos, podemos ayudarlo a fortalecer los músculos alrededor de las áreas afectadas, mejorar la postura y promover la liberación de endorfinas, los analgésicos naturales del cuerpo.
3. Fomenta la independencia: Al mejorar su fuerza, equilibrio y movilidad, el ejercicio terapéutico puede ayudarlo a realizar actividades diarias con mayor facilidad y confianza. Esto puede significar la diferencia entre necesitar asistencia para realizar tareas simples y poder realizarlas por su cuenta.
4. Promueve la salud mental: El ejercicio no solo beneficia al cuerpo, sino también a la mente. Se ha demostrado que el ejercicio terapéutico reduce el estrés, la ansiedad y la depresión, al tiempo que mejora el estado de ánimo y la calidad del sueño. Es una forma natural y efectiva de cuidar su bienestar emocional.
5. Prevención de futuras lesiones: Al abordar las debilidades musculares, los desequilibrios y las limitaciones de movimiento, el ejercicio terapéutico puede ayudarlo a prevenir lesiones futuras. Un cuerpo fuerte y bien equilibrado es más resistente a las tensiones y traumas que pueden conducir a lesiones.